¿Crees que se ha perdido el deseo y no os apetece practicar sexo? ¿Evitáis los momentos juntos y no llegáis a acuerdos cuando discutís? Puedes estar ante una (o varias) de estas 10 señales inequívocas de que tu relación no funciona. Pero que no cunda el pánico: para solucionarlo, si es lo que deseas, lo primero es ser consciente del problema. Los terapeutas de pareja siempre estarán ahí para echarte un clave. Charlamos sobre todo esto con Elena Requena, sexóloga y asesora de parejas, y Leticia Galeón, psicóloga sanitaria.
1. No os apetece pasar tiempo juntos
Hay personas que evitan pasar tiempo con su pareja cuando la relación atraviesa una crisis, y prefieren estar con familiares o amigos, o ponen excusas para no ir a casa y encontrarse con la otra persona.
Elena Requena: A lo largo de la vida en pareja, pueden aparecer momentos en los que nos apetezca pasar tiempo con otras personas. Esto tampoco tiene por qué significar nada negativo. Ahora bien, si ese pasar tiempo con otras personas se realiza de una forma más o menos consciente para no pasar tiempo con nuestra pareja, debemos sentarnos e intentar reflexionar sobre ello y ver por qué nos ocurre esto. Puede que sintamos que ya no nos divertimos como antes, puede que nos resulte incómodo por algún motivo concreto o algo que ha pasado, etc.
Leticia Galeón: Sí, es muy probable que cuando estamos en momentos de crisis sintamos emociones como enfado, decepción, hartazgo, pena, y una manera de intentar evitar estar muy en contacto con estas sensaciones es distraernos. Estar con otras personas, amigos o familiares, es una forma fácil de conseguirlo.
2. Os cuesta recordar lo que os une
En materia de aficiones, maneras de pensar, sentido del humor... Aspectos que os unían pero que ya no sentís que sea así. No os apetece hacer ciertas actividades en común y no estáis en sintonía.
Elena: Parece que conforme pasan los años se diluye eso que nos unió en un principio. También fruto del tiempo en sí, y de las vivencias y el conocimiento mutuo que se van adquiriendo. Es importante tener presente que en momentos duros, o cuando surgen dificultades o falta de entendimiento, es normal sentir todo esto. Lo bonito, y lo importante, es poder mantener la calma y sentir que esa persona es la misma de la que nos enamoramos y eso ocurrió por un motivo.
Leticia: Claro, cuando estamos sintiendo este cóctel de emociones derivado de una situación de pareja monótona, o una crisis, no nos apetece compartir tiempo con esta persona, o nos apetece que nuestras aficiones sean un momento de escape, de disfrutar, y pueden verse contaminadas por nuestra situación personal al compartirlas. También pasa que aunque uno de los dos haga el esfuerzo y proponga hacer algo nuevo o algo que sabe que han compartido y que les gusta hacer juntos, puede que el otro no esté por la labor y que no quiera ir, y si esto se repite en varias ocasiones, cansa, y es fácil que cada uno empiece a hacer sus actividades por su lado.
3. No llegáis a acuerdos cuando discutís
Las discusiones no llegan a ningún lado, o discutís de malas maneras. Las riñas también sirven para llegar a acuerdos y avanzar en aspectos de la pareja, pero ya no es así porque ninguno quiere dar el brazo a torcer.